La Baalbek de
los Andes
Cuando en
1549 el español Cieza de León llegó al alto valle andino de Tiahuanaco, no
lejos del lago Titicaca, descubrió unas ruinas extraordinarias. Ubicada a
20 kilómetros del extremo sur de la parte boliviana del lago Titicaca y a unos
3.840 metros de altitud, Tiahuanaco se extiende sobre unas 420 hectáreas, con
vestigios megalíticos que cubren cerca de 16 hectáreas. El paisaje desolado
está flanqueado al este y al oeste por dos cadenas montañosas que alcanzan más
de 4.700 y 6.000 metros respectivamente. Es difícil imaginar un lugar más
impropio para el desarrollo de una civilización avanzada…
El
monumento más conocido de Tiahuanaco es la “puerta del sol”, un enorme bloque
de piedra erigido y decorado con un fresco.
Puerta del Sol de Tihuanaco
Además
encontramos restos de templos (uno de ellos piramidal y otro en parte
subterráneo), los vestigios de un palacio, numerosas construcciones e ídolos
tallados en imponentes monolitos. Cuando fueron descubiertas por los españoles,
las ruinas eran mucho más imponentes, pero los movimientos telúricos,
frecuentes en la región, y el desmantelamiento de que fueron objeto los muros de
la ciudad para utilizar las piedras en otras construcciones, contribuyeron a su
destrucción, hasta que fuera declarado sitio arqueológico.
Sólo los
bloques de piedra más grandes permanecen actualmente en su lugar. Fue necesario
realizar observaciones aéreas para establecer el trazado de toda la ciudad.
Desde la
llegada de los españoles, surge la pregunta acerca de la antigüedad de
Tiahuanaco. Los indios de entonces eran incapaces de dar la menor información
confiable: sólo cuentan que la ciudad fue edificada por gigantes, en una sola
noche, antes del Diluvio, y que fue destruida por un enorme terremoto o por los
rayos del Sol.
Sobre su
origen y datación, otros autores como Daniken, o como Denis Suarat en 1962 en
su obra sobre la Atlántida, postulan que nuestro planeta tendría 250.000 años
de historia de civilizaciones, en vez de los 6.000 que conocemos. Hace 250.000
años habría habido una civilización muy desarrollada en esa zona. El mar subía
hasta esa altura en aquella época y Tihuanaco estaría al nivel del mar.
Las
construcciones que podemos ver en las ruinas actuales serían por lo tanto un
puerto. La causa de que el nivel del mar estuviese tan alto es que la Luna se
encontraba tan solo a 5 ó 6 radios terrestres, lo que provocaba unas fuertes
mareas que no descendían en todo el día, ya que la Luna daba vueltas a la
Tierra a gran velocidad.
Puma
Punku, que se traduce en la Puerta del Puma, es parte de las ruinas de
Tihuanaco, que es conocida por sus enormes piedras y por la extraordinaria
precisión de su corte y colocación. Es uno de esos lugares de los que se dice
que las piedras están tan estrechamente concebidas que un cuchillo no se puede
insertar entre ellas. Este es otro de los argumentos esgrimidos para afirmar
que estas construcciones fueron construidos por una civilización superavanzada,
atlante o extraterrestre, siendo considerada la Baalbek del nuevo mundo.
La cultura
Tihuanaco es anterior a la Inca, y su cultura en conocida gracias a la
arqueología, ya que no tenían lenguaje escrito. Los primeros vestigios de la
cultura Tihuanaco datan del 400 a.C. pero no fue hasta el 500 d.C. cuando
estuvo verdaderamente desarrollada. En su mejor momento vivían en la zona
400.000 personas, centrándose alrededor de Puma Punku. El comercio y la
agricultura eran boyantes. Sin embargo, décadas de sequía sacudieron la zona
alrededor del año 1000 y la ciudad de Tihuanaco fue abandonada, disolviéndose
sus habitantes por las montañas circundantes.
Lo
extraordinario de Puma Punku con respecto al resto de ruinas de Tihuanaku es
por ejemplo un conjunto de bloques pétreos con forma de H que encajan con gran
precisión.
Otra
peculiaridad es la sujeción de baldosas de roca con piezas de cobre. Algunas
fueron martilladas en frio sobre las muescas talladas en la roca, y en otras
ocasiones el metal derretido se vertía sobre la muesca.
Debido a
la regularidad de las formas muchos autores han sugerido que realmente estos
bloques no son de piedra, sino que están hechos con cemento. No hay evidencias
de que culturas pre-incas tuviesen el conocimiento de la fabricación de cemento
y además las pruebas realizadas sobre las mismas indican que no lo son. Los análisis
indican que las hay dos tipos. Los grandes bloques son de una piedra arenisca
roja que era extraída en una cantera a 10 Km de distancia. El otro tipo es la
andesita ígnea, que se utilizaba para ornamentación y era extraída de una
cantera a orillas del lago Titicaca, a unos 90 Km de distancia. Estas piedras
se desplazaban en canoas de caña por 80 Km y se arrastraban por tierra los 10
kilómetros restantes.
Mucho se
ha hablado del peso de las piedras de Puma Punku. Hay autores que dicen que la
más grandes pesa unas 440 toneladas. Yo he visto incluso algunos sitios en los
que hablan de 1000 toneladas. Puma Punku efectivamente tiene la piedra más
pesada de todas las ruinas de Tihuanaco, que se encuentra en la plataforma de
piedra. El peso calculado de ese bloque es de unas 131 toneladas. El segundo
bloque en peso es de 85 toneladas. El resto son bastante más pequeños.
No ha
quedado constancia de las técnicas que se usaron para trabajar y mover estas
piedras, pero este hecho no sirve para afirmar que esta civilización no fuese
capaz de ello. El Partenón griego se realizó 1000 años antes que las ruinas de
Puma Punku, y sin embargo nadie dice que fue realizado por los extraterrestres.
Puma Punku
no es un puerto. Es simplemente una estructura escalonada más de las que se
encuentran en Tihuanaco, como Akapana, Oriente Akapana, Kalasasaya, Putuni, y
el templo semisubterráneo. Estas formaciones vistas desde arriba son cuadrados
esparcidos por la zona. Si en algún momento Tihuanaco hubiese estado cubierto
de agua, estas estructuras en vez de puertos serían pequeñas islas, rodeadas
por un mar que cubriría hasta las rodillas, demasiado poco profundo para ser
navegable. No tiene ningún sentido hacer un puerto así.
Referencias:
EN
INTERNET: www.lamentiraestaahiafuera.com
La Baalbek de
los Andes
Cuando en
1549 el español Cieza de León llegó al alto valle andino de Tiahuanaco, no
lejos del lago Titicaca, descubrió unas ruinas extraordinarias. Ubicada a
20 kilómetros del extremo sur de la parte boliviana del lago Titicaca y a unos
3.840 metros de altitud, Tiahuanaco se extiende sobre unas 420 hectáreas, con
vestigios megalíticos que cubren cerca de 16 hectáreas. El paisaje desolado
está flanqueado al este y al oeste por dos cadenas montañosas que alcanzan más
de 4.700 y 6.000 metros respectivamente. Es difícil imaginar un lugar más
impropio para el desarrollo de una civilización avanzada…
El
monumento más conocido de Tiahuanaco es la “puerta del sol”, un enorme bloque
de piedra erigido y decorado con un fresco.
Puerta del Sol de Tihuanaco
Además
encontramos restos de templos (uno de ellos piramidal y otro en parte
subterráneo), los vestigios de un palacio, numerosas construcciones e ídolos
tallados en imponentes monolitos. Cuando fueron descubiertas por los españoles,
las ruinas eran mucho más imponentes, pero los movimientos telúricos,
frecuentes en la región, y el desmantelamiento de que fueron objeto los muros de
la ciudad para utilizar las piedras en otras construcciones, contribuyeron a su
destrucción, hasta que fuera declarado sitio arqueológico.
Sólo los
bloques de piedra más grandes permanecen actualmente en su lugar. Fue necesario
realizar observaciones aéreas para establecer el trazado de toda la ciudad.
Desde la
llegada de los españoles, surge la pregunta acerca de la antigüedad de
Tiahuanaco. Los indios de entonces eran incapaces de dar la menor información
confiable: sólo cuentan que la ciudad fue edificada por gigantes, en una sola
noche, antes del Diluvio, y que fue destruida por un enorme terremoto o por los
rayos del Sol.
Sobre su
origen y datación, otros autores como Daniken, o como Denis Suarat en 1962 en
su obra sobre la Atlántida, postulan que nuestro planeta tendría 250.000 años
de historia de civilizaciones, en vez de los 6.000 que conocemos. Hace 250.000
años habría habido una civilización muy desarrollada en esa zona. El mar subía
hasta esa altura en aquella época y Tihuanaco estaría al nivel del mar.
Las
construcciones que podemos ver en las ruinas actuales serían por lo tanto un
puerto. La causa de que el nivel del mar estuviese tan alto es que la Luna se
encontraba tan solo a 5 ó 6 radios terrestres, lo que provocaba unas fuertes
mareas que no descendían en todo el día, ya que la Luna daba vueltas a la
Tierra a gran velocidad.
Puma
Punku, que se traduce en la Puerta del Puma, es parte de las ruinas de
Tihuanaco, que es conocida por sus enormes piedras y por la extraordinaria
precisión de su corte y colocación. Es uno de esos lugares de los que se dice
que las piedras están tan estrechamente concebidas que un cuchillo no se puede
insertar entre ellas. Este es otro de los argumentos esgrimidos para afirmar
que estas construcciones fueron construidos por una civilización superavanzada,
atlante o extraterrestre, siendo considerada la Baalbek del nuevo mundo.
La cultura
Tihuanaco es anterior a la Inca, y su cultura en conocida gracias a la
arqueología, ya que no tenían lenguaje escrito. Los primeros vestigios de la
cultura Tihuanaco datan del 400 a.C. pero no fue hasta el 500 d.C. cuando
estuvo verdaderamente desarrollada. En su mejor momento vivían en la zona
400.000 personas, centrándose alrededor de Puma Punku. El comercio y la
agricultura eran boyantes. Sin embargo, décadas de sequía sacudieron la zona
alrededor del año 1000 y la ciudad de Tihuanaco fue abandonada, disolviéndose
sus habitantes por las montañas circundantes.
Lo
extraordinario de Puma Punku con respecto al resto de ruinas de Tihuanaku es
por ejemplo un conjunto de bloques pétreos con forma de H que encajan con gran
precisión.
Otra
peculiaridad es la sujeción de baldosas de roca con piezas de cobre. Algunas
fueron martilladas en frio sobre las muescas talladas en la roca, y en otras
ocasiones el metal derretido se vertía sobre la muesca.
Debido a
la regularidad de las formas muchos autores han sugerido que realmente estos
bloques no son de piedra, sino que están hechos con cemento. No hay evidencias
de que culturas pre-incas tuviesen el conocimiento de la fabricación de cemento
y además las pruebas realizadas sobre las mismas indican que no lo son. Los análisis
indican que las hay dos tipos. Los grandes bloques son de una piedra arenisca
roja que era extraída en una cantera a 10 Km de distancia. El otro tipo es la
andesita ígnea, que se utilizaba para ornamentación y era extraída de una
cantera a orillas del lago Titicaca, a unos 90 Km de distancia. Estas piedras
se desplazaban en canoas de caña por 80 Km y se arrastraban por tierra los 10
kilómetros restantes.
Mucho se
ha hablado del peso de las piedras de Puma Punku. Hay autores que dicen que la
más grandes pesa unas 440 toneladas. Yo he visto incluso algunos sitios en los
que hablan de 1000 toneladas. Puma Punku efectivamente tiene la piedra más
pesada de todas las ruinas de Tihuanaco, que se encuentra en la plataforma de
piedra. El peso calculado de ese bloque es de unas 131 toneladas. El segundo
bloque en peso es de 85 toneladas. El resto son bastante más pequeños.
No ha
quedado constancia de las técnicas que se usaron para trabajar y mover estas
piedras, pero este hecho no sirve para afirmar que esta civilización no fuese
capaz de ello. El Partenón griego se realizó 1000 años antes que las ruinas de
Puma Punku, y sin embargo nadie dice que fue realizado por los extraterrestres.
Puma Punku
no es un puerto. Es simplemente una estructura escalonada más de las que se
encuentran en Tihuanaco, como Akapana, Oriente Akapana, Kalasasaya, Putuni, y
el templo semisubterráneo. Estas formaciones vistas desde arriba son cuadrados
esparcidos por la zona. Si en algún momento Tihuanaco hubiese estado cubierto
de agua, estas estructuras en vez de puertos serían pequeñas islas, rodeadas
por un mar que cubriría hasta las rodillas, demasiado poco profundo para ser
navegable. No tiene ningún sentido hacer un puerto así.
Referencias:
EN
INTERNET: www.lamentiraestaahiafuera.com
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